En la actualidad estamos bastante concienciados en la necesidad de acudir a revisiones médicas con relativa frecuencia, buscando la prevención de posibles enfermedades o problemas y mejorar o mantener nuestro estado de salud. Sin embargo, en lo que respecta a los pies, la media baja considerablemente, son los grandes olvidados en salud y no se les presta la fundamental atención que en realidad necesitan.
Una gran parte de nuestra sociedad solo acude a una clínica podológica cuando ya se sufren de dolores o enfermedades y esto es un grave error. En Clínica Podológica Lourdes García recomendamos acudir al menos una vez al año con el fin de revisar la salud de nuestros pies, ya que por lo general los sometemos a cargas importantes de manera diaria y es sumamente importante la prevención de lesiones y problemas.
Es muy normal que nuestros pies en un momento dado se resientan y den muestras de dolor, ya que diariamente los usamos y a veces castigamos en exceso. Estas primeras apariciones de molestias suelen ser indicativas de posibles lesiones. En Clínica Podológica Lourdes García tratamos de manera diaria los siguientes patologías:
El incorrecto crecimiento de una uña puede derivar en lo que denominamos uña encarnada. En un gran número de casos, al cortarnos las uñas de una manera equivocada, podemos hacer que se nos clave en el mismo dedo, provocando hinchazón, dolor, enrojecimiento… La uña encarnada es de los problemas más comunes.
El uso de tacones altos o la práctica de algunos deportes como el esquí y la escalada generan esta dolencia, que generalmente afecta en una proporción mucho mayor a las mujeres frente a los hombres y consiste en la irritación de los nervios del pie causando molestias y dolores.
Cuando visitamos frecuentemente zonas húmedas y de mucha afluencia de personas (piscinas, baños públicos) estamos especialmente expuestos a este problema. Los hongos en los pies nos pueden producir picores, descamaciones, enrojecimiento y mal olor.
En consulta solemos tener muchos pacientes deportistas con una enfermedad producida por un hongo, es la conocida patología llamada pie de atleta.
Normalmente, los responsables de mal olor de nuestros pies viene precedido por una infección de hongos, ya que el sudor es descompuesto más rápidamente.
Los callos o durezas aparecen en zonas donde habitualmente el pie no soporta peso y pueden llegar a ser tremendamente dolorosos al presionarlos. Suelen ser producidos por un uso de calzado inadecuado.
Las molestias son más intensas cuando nos levantamos por la mañana, después de estar sentado bastante tiempo o al caminar y correr.
El uso de un calzado demasiado estrecho o el abuso de zapatos no adecuados (tacones) suele ocasionar esta patología. Con ortesis de silicona podemos compensar y solucionar este problema.
Las molestias son más intensas cuando nos levantamos por la mañana, después de estar sentado bastante tiempo o al caminar y correr.
El virus del papiloma nos genera lesiones dérmicas en los pies con puntos negros y se contagia de manera similar a los hongos. Esta dolencia nos llega a ocasionar una mayor sensibilidad y por ende grandes molestias y dolores.
En nuestra clínica de podología disponemos de la aparatología más novedosa para detectar problemas de pisada (pies planos, pies valgos, pies cavos, pies varos…. Las sobrecargas y dolencias musculares que vienen producidas por una pisada incorrecta o debido a pies con una alteración en el arco plantar son tratadas de manera eficaz.
Esta patología ocasiona ciertas deformidades en los laterales del dedo gordo y suelen afectar a personas con un calzado no adecuado y que además tengan predisposición por genética a producirlo. Es una dolencia tremendamente extendida y conocida.
Dependiendo de nuestra edad, trabajo, genética o si sufrimos de ciertas enfermedades, debemos acudir en mayor o menor medida a nuestro podólogo, ya que existen grupos de riesgo más vulnerables de sufrir alguna de las patologías anteriormente citadas.
En Clínica Podológica Lourdes García somos expertos en el cuidado de tus pies, llámanos y te concertaremos una cita, tus pies te lo agradecerán.